The Governor'S Inn Ludlow

Reseña de un crítico de hotel

Recientemente tuve la oportunidad de alojarme en the Governor's Inn en Ludlow, Vermont, y ha sido una experiencia que quedará grabada en mi memoria. Desde el momento en que cruzamos la puerta, la calidez del lugar y el ambiente acogedor me hicieron sentir como en casa. Las habitaciones están decoradas con mobiliario antiguo, dándole un encanto especial que me recordó a los típicos alojamientos boutique en Andalucía. La verdadera joya de este lugar son los desayunos. Despertar cada mañana con los aromas de un desayuno exquisito es un lujo del que no me puedo quejar. Opté por la tarta de queso y patata con salchicha perfectamente cocida, ¡un verdadero festín para el paladar! Además, el té de la tarde, servido con de encantadores sándwiches y deliciosas galletas, es una tradición que debería formar parte de la rutina de todos. Si eres amante del buen comer, como yo, no te puedes perder la oportunidad de participar en una clase de cocina o una cata de vinos que ofrece Jim, el anfitrión, quien es un verdadero maestro en el arte de la hospitalidad. Y no olvidemos que, después de un día de exploración en el Valle de Okemo, con tanto por ver y hacer, regresar a un lugar tan acogedor es el cierre perfecto para el día. Sin duda, the Governor's Inn se ha convertido en un destino al que espero volver en mis futuras escapadas.